lunes, 10 de enero de 2011

Centenario del Natalicio de Mauricio Magdaleno (1906-2006)

Samuel Rivera y Eduardo Campech Miranda


Mauricio Magdaleno Cardona, nacido en Villa del Refugio, hoy Tabasco, Zacatecas, el 13 de mayo de 1906, fue un escritor que cultivó diversos géneros literarios, desde el cuento hasta el ensayo, pasando por el teatro, el guión cinematográfico, la crónica periodística y los cuadros históricos.

Vivió en su ciudad natal sus primeros años, pero los primeros brotes de la Revolución llevaron a la familia a mudarse a la ciudad de Aguascalientes, donde estudió la primaria y la secundaria. Durante su estadía en esa ciudad Mauricio Magdaleno tuvo oportunidad de asistir a óperas italianas en el histórico Teatro Morelos de Aguascalientes, y al tiempo que veía de cerca las revueltas revolucionarias, leía a Dumas y aVictor Hugo. (Cfr. Mauricio Magdaleno, El resplandor, prol.Raúl Cardiel Reyes, México, Promociones Editoriales Mexicanas, 1979). En 1920 las mismas razones obligan a su familia a emigrar nuevamente, esta vez hacia la capital del país.

En ese año su padre conoce a José Vasconcelos, entonces rector de la Universidad, y aboga por la admisión de su hijo a la Escuela Nacional Preparatoria, ubicada entonces en el Colegio de San  Ildefonso. Durante ese periodo conoce a Narciso Bassols quien era entonces Secretario de Educación Pública y se interesa ampliamente por las ideas de Magdaleno recomendándolo para trabajar con Vito Alessio Robles, director
del periódico El Demócrata, en el que redacta desde editoriales hasta críticas literarias y políticas.

En 1924 finaliza sus estudios de preparatoria graduándose con la generación de Miguel Alemán Valdés, Juan Bustillo Oro y Germán del Campo e inmediatamente ingresa a la Universidad en la Facultad de Derecho cumpliendo la voluntad de su padre. Sin embargo,Mauricio Magdaleno no se encuentra satisfecho con la elección y decide realizar su traslado al Centro de Estudios Superiores (hoy Facultad de Filosofía y Letras) para cursar la carrera de Letras donde conoció a otros ilustres pensadores: Antonio Castro Leal, Antonio Caso y Carlos González Peña y crece su deseo por involucrarse en la política, particularmente en materia educativa y cultural, y se integra al movimiento Vasconcelista de 1929, convirtiéndose en un crítico mordaz de la administración de Calles, lo cual provocó que pisara la cárcel en varias ocasiones.

Tres años más tarde siendo aún estudiante, funda junto con su antiguo compañero Juan Bustillo Oro el denominado Teatro de Ahora, gracias al apoyo económico de Bassols. Este proyecto nacionalista que se contrapone al Teatro de Orientación del grupo Ulises, le permitió montar las obras de su autoría Pánuco 137Emiliano Zapata y Trópico que posteriormente fueron publicadas bajo el nombre de Teatro revolucionario mexicano. Después de una breve temporada de las obras, primero en la capital del país y luego en diferentes estados, parte a España becado por Narciso Bassols, y continúa su formación universitaria en la Universidad Central de Madrid (Max Aub, Guía de narradores de la Revolución Mexicana, México, Fondo de Cultura Económica, 1969, p. 50). Asimismo, prosiguió su labor periodística colaborando con El Sol, diario bajo la dirección de Martín Luis Guzmán.


Propiamente, la tarea literaria de Mauricio Magdaleno inicia en 1927 con Mapimí 37, novela que le serviría de argumento para “Pánuco 137”, pero no fue sino hasta 1934 que es publicada su primera novela: Campo Celis, una historia prerrevolucionaria donde reafirmaba su interés por los temas sociales y la cual se desarrolla en su natal Villa del Refugio, pese a que Magdaleno no conocería su terruño sino hasta una edad madura. Es también destacable su participación como cronista en los periódicos mexicanos El Universal y El Nacional y en los extranjeros La Nación de Buenos Aires y La Estampa de Madrid.

Una de las facetas más reconocidas de Mauricio Magdaleno fue la de guionista cinematográfico.Ya en 1933 a su regreso de España había colaborado en la adaptación de su historia original El compadre Mendoza, con el director Fernando de Fuentes para la película homónima, que fue muy bien recibida por la crítica. Sin embargo es en el periodo de 1941 a 1953 cuando se desempeña con mayor ahínco en esta labor. Desarrolló particularmente una estrecha y prolífica relación profesional con Emilio “El indio” Fernández, quien le fue presentado por el productor de cine Agustín J.Finck.

Entre muchos otros largometrajes, con Fernández como director y Gabriel Figueroa como fotógrafo, Magdaleno participó como autor y/o adaptador de los guiones de: Flor Silvestre (1943), María Candelaria (1943), Las abandonadas (1944), Bugambilia (1944), Pepita Jiménez (1945), Río escondido (1947), Pueblerina (1948), Maclovia (1948), Salón México (1948), La malquerida (1949), Un día de vida (1950), Víctimas del pecado (1950), Islas Marías (1950), Siempre tuya (1950), y La bien amada (1951).También en este rubro tuvo la oportunidad de colaborar con Xavier Villaurrutia para los diálogos de la película de Julio Bracho La mujer de todos, y con Luis Buñuel para su obra Gran Casino, ambas de 1946. Como director Magdaleno realizó, entre otras, la película La herencia de la Llorona en 1948. Durante estos años su lucha por el reconocimiento del trabajo intelectual fructifica en la creación de la Sección de Autores y Adaptadores Cinematográficos del STPC, de la cual es miembro fundador en el año de 1944. Entre 1941 y 1945 escribió y adaptó 52 guiones cinematográficos,muchos de ellos considerados verdaderas obras de arte de la cultura nacional.

A lo largo de ese periodo Mauricio Magdaleno no descuidó su labor como novelista y en 1937 publica su novela más célebre, El resplandor. También con una fuerte carga social, la obra fue traducida a varios idiomas. En ella el autor da a conocer la situación de los otomíes y explica las causas que la originaron. El resplandor es considerada una de las mejores novelas de su tiempo, por su trama sólida, sus personajes humanos y su estilo eficaz. De acuerdo al crítico Max Aub: “El estilo de Mauricio Magdaleno se diferencia del de sus antecesores latinoamericanos, en su barroquismo —Rivera,Gallegos, Arguedas, Barrios, etc. El periodo vuelve a ser más largo, las descripciones más amplias, menos concisas, los detalles más señalados, sin perder lo ganado por Azuela en cuanto a lo exacto y lo popular del diálogo.Magdaleno merece más de lo que en general se le otorga.” (Ídem.)

El ensayo es otro de los géneros que cultivó este polifacético escritor. Entre las obras de este género se encuentran José María Luis Mora, el civilizador. Semblanza y selección del pensamiento reformador (1935),Vida y poesía (1936), Fulgor de Martí (1940),Tierra y viento (1948), Las palabras perdidas (1956), El compromiso de las letras (1958), La idea liberal de Mora (1963), Ricardo Flores Magón, el gran calumniado (1964), Agua bajo el puente (1968) y Retórica de la Revolución (1978) entre varias más. Al momento de su deceso dejó inconcluso el libro Noche cerrada.

Los cargos públicos son otro de los aspectos de la vida de Mauricio Magdaleno; ya mencionamos anteriormente su muy temprana adhesión a la política en materia cultural de José Vasconcelos y de su relación
con Narciso Bassols. Precisamente gracias a este último fungió como director de la escuela rural del Mexe, en pleno Valle del Mezquital, cerca de Ixmiquilpan, Hidalgo, donde pasa varios meses en chozas humildes observando a los grupos indígenas otomíes; de esta experiencia fue que surgió la ya mencionada novela El resplandor. Fue Presidente de la Junta Revisora sobre el Impuesto sobre la Renta y para 1934 es nombrado director de la Biblioteca de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Posteriormente ocupó el puesto de Jefe de los Departamentos de Bibliotecas y Bellas Artes de la Secretaría de Educación Pública; coordinador de la Secretaría de Gobernación, donde dirigió el programa radiofónico La Hora Nacional, y de Bibliotecas y Archivos Económicos de la Secretaría de Hacienda. Posteriormente se desempeñó como Diputado federal,  jefe de la Dirección General de Acción Social del DDF, Senador de la República por Zacatecas y subsecretario de Asuntos Culturales de la SEP en el periodo presidencial de Gustavo Díaz Ordaz. En este último puesto Magdaleno continuó la colección que había iniciado Jaime Torres Bodet con el título “Biblioteca Enciclopédica Popular”, bajo el nuevo nombre de “Cuadernos de Lectura Popular” y de los cuales llegó a editar más de 200 títulos, en grandes tirajes y a precios populares.


El 14 de junio de 1957 Mauricio Magdaleno ingresó a la Academia Mexicana de la Lengua como Miembro
Titular. Le fue otorgado el Premio HeliodoroValle en 1976 y el Premio Nacional de Letras,Ciencias y Artes en 1981. Formó parte del Patronato del Instituto Nacional de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana y la Biblioteca Central del Estado de Zacatecas lleva el nombre de este gran escritor. El 30 de junio de 1986 falleció en la ciudad de México.

Como parte de las actividades para celebrar el centenario del natalicio de Mauricio Magdaleno se llevará a cabo en Zacatecas un amplio programa cultural que incluye diversos talleres literarios y conferencias en torno a su obra. El homenaje, que se realizará de forma paralela en las ciudades de Tabasco y Zacatecas del 8 al 13 de mayo, contempla la proyección de películas, obras de teatro y conciertos, en escenarios como el Teatro Calderón, la Plazuela Goytia y la Biblioteca Pública Central Estatal, entre otros espacios. También, como parte de esta celebración, se colocará una placa conmemorativa en su ciudad natal y se estampará con letras de oro su nombre en la Legislatura del Estado.

http://dgb.conaculta.gob.mx/Documentos/PublicacionesDGB/RevistaBibliotecario/2006/Bibliotecario59.pdf

2 comentarios:

  1. ¡Excelente!, Yo ví la película "El compadre Mendoza" y me gustó mucho, nunca llegué a imaginar que fuese una película cuyo guión ayudó a escribir un intelectual oriundo de los municipios zacatecanos colindantes con Aguascalientes.

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  2. Gracias por tu comentario. Leí "El compadre Mendoza" cuando colaboré en el presente artículo. No recuerdo si era parte de "Concha Bretón" o "Campos Celis", ambas publicadas bajo el sello de Ediciones Botas. La Biblioteca Pública Central Estatal "Mauricio Magdaleno" de Zacatecas, Zac., cuenta con un par de ejemplares. Saludos.

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